viernes, 20 de septiembre de 2013

Desvaríos varios

Recién noto el juego de palabras que espontáneamente he formado; tal cual dice el título, en esta categoría clasificaré algunos pequeños escritos sin relación uno con otro...



Y como todo, he de acabar aquí, mas seguiré presente. Un fantasma preso de la memoria de quienes conmigo caminaron yendo o viniendo, o  sólo siendo un rumor para quienes sólo les ofrecí el saludo.
Ni en la mínima parte del tiempo podremos borrar nuestras huellas; el instante que dura una mirada curiosa y tímida, ya estamos en alguien más.


Y si no había causa alguna para terminar por convencerme de que quiero estar a tu lado, apareces sólo como tú sabes hacerlo, seduciendo, sin que lo puedas notar o premeditación,  a mi fantasía, y va creciendo esta ansiedad que se convierte en dolor, y mientras sufro en esta realidad, más por gusto que por resignación, encuentro contigo, o mejor dicho, en ti, la tinta de mi por siempre desdichada pluma.


Moriré de noche para que tus lágrimas se extingan antes de derrarmarse con los rayos del sol... moriré con una sonrisa en mi rostro para intentar contagiartela... moriré para hacerte libre de mi... moriré y sin más tendremos que separarnos... si no te estoy atando no debes hacerlo tu conmigo... dime adiós... pues no sabré decirte si cuando llegues donde yo, me encontraré en el mismo espacio.

Mi mente se empieza a sumergir en un mundo más oscuro que el negro,  ni siquiera encuentro en el caos de mi cabeza algo quemándose, que no importando lo que sea, me brinde tan solo un poco de luz para mirar a quien tengo a lado; pronto tocas mi hombro... ya no importa en donde me encuentre, ya no importa el caos de alrededor, ya no importa la luz que no poseo, sólo me importa que estas tú.

© Alexander Zante 2013
 

 

domingo, 1 de septiembre de 2013

¡Quién puede enseñar, a escribir, poesía!

Ya puedo escuchar voces dandolé valor a mi cabeza.

Desde hacía tiempo esta interrogante no dejaba de vociferarme, y es ahora, ayudado por un cierto detonante, que me digno a prestarle algo de atención, antes del desarrollo es común iniciar con algo de historia.

Conozco y he leído las formas, pues no son normas como tales, para escribir "poemas", así lo pongo pues me da un poco de escozor esa palabra, ni para mí mismo me refiero como poeta, prefiero el término escritor, retomando, mas nunca había sabido de algún salvaje que fuera capaz de instruir en este arte, refiriendome claro está (hago la aclaración pues no quiero, cuando muerto, que alguien vaya a profanar mi tumba), explicítamente a su "correcta" escritura.

¡¿En verdad existe semejante ser, con el poder o la facultad de dar catedra de escribir buena poesía?!, pudiera estar tergiversando una idea absurda, y sí, deseo mostrar cúan absurda puede tornarse; es como si en estos tiempos, que no dudo y pase pronto, se abriese una institución para aprender a sentir.
El uso de una metodología, y agregados, nos conduciría a convertir un arte en ciencia; se enseñan las palabras, pero la poesía, por favor.

Aunque si bien pudiera no estar en lo correcto, cosa que, arrogantemente, dudo, aquel que pudiera enseñar a escribir poesía, estaría, hablando de una manera más correcta, enseñando a sentir cual él, y entonces, ¿quién habría de desear convertirse en la extensión de otro?

Momentáneamente, mi ligero enfado a cesado, por lo que habré de darle puntos suspensivos a este escrito...






Comete tus propios errores, en vez de multiplicar los de alguien más.
Alexander Zante


©Alexander Zante 2013

Twitter: